noviembre 08, 2006

¿Quién tira las primeras flores?


Todo un lío formó el senador Fernando Flores en el Partido Por la Democracia (PPD), debido a su renuncia a esa tolda política, la que presentó para protestar por la mala conducta del congresista Guido Girardi –también del PPD–, quien resultó con las manos untadas, al parecer de delito, en la repartición de unas platas en Chiledeportes.
Sea ocasión de decir que Flores nos cae bien, especialmente porque es un bloguero consumado.
Pero nosotros somos la minoría, y hay a quienes no les cae bien, y vamos a explicarlo un poco.
Guido Girardi es un médico joven metido en la política, que tiene la cualidad (fea) de hablar siempre como si fuera enviado de Alá.
Ahí está con su prepotencia y suficiencia que dan grima...
Resulta que la Contraloría hizo una investigación del erario, y descubrió que a Chiledeportes lo habían cogido como el instituto rico, digno de repartir su dinero entre todos los políticos.
Y entre quienes tenían las manos sucias... ¡figuraba el bueno del Girardi!
Pues bien, el PPD, ahora comandado por quien fuera –en otra época– casi un símbolo, pero que ahora es un politiquero más, Sergio Bittar, salió y dijo algo en apoyo de Girardi.
¡Y de aquí viene la rabia de ají picante que tiene Flores!
¿Acaso el PPD es una pandilla? –dijo Flores–, ¿o es acaso el PPD una camorra?
En este punto elevó la voz, y dijo:
–¡Renuncio al PPD!
Bittar, que se ha vuelto un hombre sagaz en esto de hilar delgado, dijo que ¿qué?, ¿cómo se le ocurre a Flores que hagamos una defensa corporativa de Girardi?, y anunció que este médico politiquero será puesto en “el tribunal del partido”, y si resulta culpable, “tomaremos las previsiones”.
Pero alguien más, metió la cuchara y dijo que Flores estaba bravo, por dos razones:
1.- Porque había perdido las elecciones para la presidencia del PPD, justamente con Bittar, y
2.- Porque su amigo Rodrigo González fue involucrado en otro robo de platas del pueblo chileno, y el PPD no había dicho nada.
Cuando vemos cosas como estas, nos quedamos pasmados.
Nos quedamos pensando en la capacidad de cinismo que se necesita para ser un buen político, casos de Sergio Bittar, Guido Girardi, Rodrigo González y Fernando Flores.
BloGalaxia